Si existe un plato que vuelve locos a los más peques ese es, sin duda, la pasta. Un plato que hasta consigue frenar hasta el llanto de un niño. “Si te portas bien, hoy comeremos pasta”, no falla. Para los niños es sinónimo de comer “algo rico” y funciona casi como un premio. Además, los ingredientes quedan en un segundo plano; da igual si es boloñesa o queso, lo importante para ellos es que es pasta.
Lo mejor de todo es que, siendo uno de los platos preferidos de los más peques, es muy beneficioso para su nutrición y, dicen los expertos, que tiene que estar contemplado dentro de una dieta equilibrada.
Beneficios de la pasta
Fuente de energía
La pasta forma parte del grupo de los cereales y es una de las mayores fuentes de energía porque aporta muchos hidratos de carbono, que vendría a ser la gasolina para los más peques (y no tan peques). Con su consumo, los niños podrán enfrentarse a las actividades con la energía que necesitan para correr, saltar o estudiar. Además son hidratos complejos (los buenos), es decir, no de azúcares, sino de almidón.
Bajo en calorías
La pasta, aunque se suela pensar lo contrario, es baja en calorías. Por cada 200 gramos de pasta cocida, aporta unas 340 Kcal, de ellas un 82% aproximadamente son hidratos de carbono, un 14% proteínas y solamente un 4% grasas. En este artículo puedes conocer más sobre el análisis nutricional de la pasta.
Poco colesterol
Además de contener pocas grasas, tampoco colesterol. De hecho, los expertos se posicionan a favor de derribar el falso mito de que la pasta engorda.
Fibra y vitaminas
Sumado a lo anterior, la pasta también aporta fibra y minerales como el calcio, magnesio, potasio, fósforo y selenio, además de vitamina B que favorecen el metabolismo de los hidratos y ayudan al buen funcionamiento del sistema nervioso.

Como vemos, este plato que tanto gusta a los peques, contiene grandes beneficios. El problema es que a la hora de elegir los ingredientes con los que acompañar la pasta, apostamos por los que no son tan beneficiosos. Por ejemplo, el tomate frito de bote, mejor cambiarlo por tomate natural triturado, el bacon por carne picada y una salsa preparada de sobre, por una cocinada por nosotros donde incluso podemos incluir verduras bien picadas que no sean perceptibles por los niños con ingredientes que sean beneficiosos para la salud de los peques.

Y si toca comer fuera de casa, para controlar tanto la cantidad como los ingredientes, puedes visitar restaurantes buffets como Muerde La Pasta, donde puedes elegir exactamente lo que va en el plato de tu peque y combinarlos entre ellos para que tenga la cantidad idónea de cada uno agregando un poco de pasta, verduras, carne, pescado y todo lo que desees para que tu peque tenga la energía suficiente para pasar una tarde corriendo, jugando y con las pilas cargadas.